martes, 21 de octubre de 2014

Taller de Sensibilización en Discapacidad

Planificando una actividad adaptada para una posible integración.

 
Sensibilización

 Una cuerda con cencerro

Deporte Torball

lunes, 20 de octubre de 2014

DISCAPACIDAD

Para reflexionar.

https://www.facebook.com/video.php?v=146783251288


DISCAPACIDAD Y ESCUELA



La actividad física ayuda a mejorar las capacidades físicas de cualquier persona y así mismo las de aquellas que por algún tipo de circunstancia (enfermedad, accidente, traumatismo, o cualquier otro problema) se hallen mermadas de alguna manera física, mental o sensorial. Con esta actividad se pueden mejorar factores distintos como la movilidad, autonomía, autoestima, aceptación por otros, sociabilidad, comunicación…, que hacen referencia de forma implícita a la salud y calidad de vida de las personas como pilares básicos.

Hay que tener presente siempre tres aspectos fundamentales y a los que hemos sumado un cuarto no menos importante para poder intervenir de manera adecuada en nuestras clases con alumnos con discapacidad:
- La persona como individuo único y con características propias.
- El contexto social donde vamos a intervenir.
- El proceso de aparición de la discapacidad.
- Los recursos de los que disponemos.

Por desgracia, sigue incorporado a nuestra sociedad la idea de que cuando hablamos de “persona discapacitada”, le aplicamos una etiqueta, o le incluimos en un estereotipo, provocando que la imagen que recibimos sea de una persona enferma, que va en silla de ruedas, débil, que no puede hacer nada. Por ello, cuando recibimos a una persona en nuestras clases, que quiere participar en un programa de actividad física, antes de ponerlo en duda, tenemos que mantener una mente abierta, con unas miras amplias, y preguntarnos en primer lugar ¿cómo se ha convertido en discapacitado? Si no hacemos esto, nos podemos equivocar en todo lo demás, antes de planificar nada, antes de comenzar, ya vamos mal desde el principio.
Debemos comprender las causas de esa deficiencia física o mental y comprender los conceptos anteriores de deficiencia, limitación, discapacidad y minusvalía.
Lo importante es que cuando hablamos de deficiencia (etiqueta), nos referimos a un diagnóstico, a una característica de una persona en concreto. Confundiendo a deficiencia con la realidad individual y social de la persona. Etiquetar es creer que podemos definir a una persona por su deficiencia, porque eso la reduce a su anomalía, aislándola de sus capacidades, eso es tendencioso. Por lo general, tendemos a creer que personas con deficiencias similares tienen las mismas características y necesidades.

Las deficiencias deben ser para nosotros como un diagnóstico, una información útil, ese es el punto de partida a partir de aquí debemos recabar información cualitativa según as capacidades funcionales de cada persona.

Cuando hablamos de actividad física adaptada debemos pensar en una persona concreta que tiene una deficiencia significativa, que se traduce en limitaciones funcionales. A modos de ejemplo si tiene una deficiencia auditiva o en el habla, el problema fundamental con el que se encuentra es de la comunicación. En muchos casos, el problema del alumno o la persona que sea puede ser muy diverso, desde: no poder desplazarse, de no poder resistir un esfuerzo prolongado, el no comprender lo que se le dice, ser incapaz de sujetar un objeto, no entender la información, no soportar entornos con mucho ruido o cambiantes, cualquiera de estas deficiencias provocará dificultades de aprendizaje.
Para evitar todas estas dificultades se produce lo que llamamos adaptación, que es un proceso individual sobre una persona determinada a la que se le ofrecen medios especializados e intervenciones concretas para que pueda mejorar su capacidad de funcionamiento.

Justificación de las adaptaciones en las actividades físico deportivas

Adaptar, como hemos visto, es facilitar o hacer accesible la participación en las actividades del alumnado con discapacidad.
Cuando el menoscabo en los diferentes parámetros físicos, mental o sensorial no es muy significativo, puede participar con los demás compañeros y compañeras.
Habrá que adaptar algunos elementos que definen estas actividades (material, espacio, tiempo, composición de los grupos, formar de puntuar, reglas).
La condición “sine qua non” para ofrecer a los alumnos y alumnas con discapacidad la posibilidad de hacer deporte y participar con sus compañeros y compañeras, es que se sienta:

- Útil.
- Aceptado para participar con todos.
- Que progresa y que mejoran sus competencias personales.
- Alcanzar las sensaciones de bienestar y placer por los logros conseguidos.
- Reforzar su compromiso por mejorar sus capacidades y habilidades.

ACTIVIDAD FÍSICA ADAPTADA

Programar actividades específicas para el alumnado con discapacidad dentro de una educación general, que favorezcan el desarrollo motor de los niños y que supongan un aprendizaje para toda la vida, nos hace centrarnos en las actividades físicas adaptadas. Los educadores se han visto en la necesidad de integrar a los alumnos con necesidades educativas especiales en aulas ordinarias, lo que les obliga a realizar una educación personalizada.
El principal problema que se presenta en las clases de educación física es hacer participar realmente al alumnado con discapacidad motriz en nuestras clases prácticas, por el motivo que sea, bien visual, motriz, fisiológico o mental. Como dice la profesora Ríos (2001), no debemos caer en la falsa integración de que hagan estos alumnos exclusivamente acto de presencia, asuman roles pasivos, abusen del trabajo teórico, destinen el tiempo de clase a sesiones de fisioterapia o/y la realización de actividades individualizadas al margen de los compañeros. Para conseguirlo debemos ser realistas y proponer actividades adecuadas a las necesidades que requieren y sus posibilidades.

El profesor de educación física tiene la necesidad de consultar o recibir información por parte de los diferentes especialistas como:
- Médico: aspectos importantes de los déficit.
Fisioterapeuta: para saber más sobre sus posibilidades de movimiento.
- Tutores: las relaciones con los demás y sus propias actitudes en el aula.

Todos estos contactos serán muy positivos, para el alumnado y para el profesor, que con ellos ampliaran los conocimientos sobre los alumnos, para mejorar en sus posibilidades de actuación de un modo más racional con la discapacidad motriz.